¿Sientes que te falta energía? ¿Crees que podrías ser más productivo? Quizás deberías revisar tus hábitos alimentarios; ya que estos afectan directamente, no solo tu salud, sino también tu rendimiento físico e intelectual.
Una mala alimentación disminuye la capacidad de concentración y memoria, reduciendo la productividad hasta un 20% y aumentando el riesgo de accidentes laborales. En cambio, una buena alimentación te mantendrá sano, alerta y concentrado.
Para aumentar el rendimiento hay 3 hábitos que son fundamentales:
Una mala alimentación disminuye la capacidad de concentración y memoria, reduciendo la productividad hasta un 20% y aumentando el riesgo de accidentes laborales. En cambio, una buena alimentación te mantendrá sano, alerta y concentrado.
Para aumentar el rendimiento hay 3 hábitos que son fundamentales:
Desayunar siempre.
El desayuno es la primera fuente de energía que recibimos, preparándonos para comenzar el día. Para tener un BUEN día debes comenzar con un BUEN desayuno.
Beber suficiente agua.
El cerebro es particularmente sensible a los cambios en el balance hídrico. A medida que el cuerpo pierde agua, la capacidad intelectual va disminuyendo de forma progresiva y son muchas las funciones cognitivas que se ven debilitadas: la memoria, la atención, la coordinación psicomotriz, la destreza.
Por esta razón, beber lo necesario es especialmente importante para las personas que realizan un trabajo intelectual. Te sugiero revisar las claves para una buena hidratación y la pirámide de la hidratación saludable para saber qué y cuánto beber. Además, si quieres mantenerte bien hidratado, hay 5 cosas que debes saber.
Por esta razón, beber lo necesario es especialmente importante para las personas que realizan un trabajo intelectual. Te sugiero revisar las claves para una buena hidratación y la pirámide de la hidratación saludable para saber qué y cuánto beber. Además, si quieres mantenerte bien hidratado, hay 5 cosas que debes saber.
Realizar todas las comidas.
Si el aporte de nutrientes se mantiene constante durante el día, tu nivel de energía también lo hará y evitarás la fatiga y la falta de concentración. Por ello es necesario realizar, al menos, las 4 comidas principales: desayuno, almuerzo, merienda y cena.
Estos 3 hábitos, además de aumentar tu rendimiento, te aportarán muchos otros beneficios. ¡Aprovéchalos!
1 comentario:
Hola; me parece muy interesante, este post. Es muy importante mantener una alimentación correcta y equilibrada para poder tener un rendimiento correcto en el trabajo. He leído también el siguiente post,sobre cómo nos influye el entorno laboral a nuestra manera de alimentarnos,que también está genial y que probablemente os interesará : http://www.alimentateconsalud.com/varios/el-entorno-laboral-puede-determinar-la-manera-de-alimentarnos
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